Rejuvenecimiento facial con luz pulsada intensa
Luz Pulsada intensa (IPL) Está indicada para pacientes que quieren mejorar el aspecto de la piel facial, del escote y/o del dorso de las manos. El resultado final es una piel más tersa, clara y de aspecto más joven.
El tratamiento con IPL mejora especialmente las arrugas finas, las manchas solares, las pequeñas telangiectasias (cuperosis), las rojeces difusas y el tamaño del poro de la piel.
El tratamiento consiste en la aplicación de un haz de luz similar al láser pero más versátil y con mejores resultados.
Los pacientes no deben estar bronceados al iniciar el tratamiento.
En general son necesarias entre una y tres sesiones y en cada sesión el aspecto de la piel va mejorando. Para mantener el buen aspecto de la piel aconsejamos un tratamiento al año.
Este tratamiento permite la reincorporación a la vida normal de forma inmediata. Ocasionalmente se puede notar una sensación de calor y la piel, transitoriamente, enrojecida, pero el uso de maquillaje permite ocultar esta rojez transitoria.
Sus beneficios son especialmente visibles al mes del tratamiento y es en este momento cuando se valora el resultado de la primera sesión y se evalúa la necesidad de una sesión de repaso de alguna mancha o rojez o la realización de una nueva sesión.
Una vez realizado el tratamiento y especialmente durante el primer mes, debe usarse protección solar alta y evitar la exposición solar directa. Las manchas producidas por el sol tienen tendencia a reaparecer si no nos protegemos bien.